Para conocer cuál es el eneatipo de una persona es importante conocer los distintos tipos de eneatipos que podemos encontrar. Ya te hemos hablado de las características del eneatipo 1 y ahora toca ver cuáles son las características del eneatipo 2.

Como bien sabrás, cada eneatipo refleja un tipo de personalidad, con sus limitaciones y sus potencialidades. Es momento de adentrarnos en el eneatipo 2 y ver cómo se maneja en ambas facetas.

Eneatipo 2

El eneatipo 2 se caracteriza por su belleza. La belleza estética y pura. Comparable a la belleza de las flores, que por el simple hecho de ser flores son hermosas. Los eneatipo 2 gozan de una naturalidad que les permite seducir con su mirada penetrante, con algo coqueto, con simplemente ser.

Su belleza les permite ser explosivos, dinámicos e incluso volátiles. Son nómadas que honran con su ser a todos ante quienes se presentan. Son altamente emocionales, el más salvaje de todos los eneatipos y a su vez imparable.

Su afán de aventura lo vuelve alocado y no es capaz de contenerse en un sitio por mucho tiempo, una inquietud que le hace desplazarse constantemente.

El eneatipo 2 es inquieto por naturaleza, tiene esa necesidad de salir y explorar a cada instante. Generan una sensación de amor-odio que se traduce en desapego, pero no por eso son menos sensibles. Su manera de actuar puede ser difícil de entender, pero fácil de consentir.

Sin embargo, son un tipo de personas muy desconfiadas y eso hace que, en muchas ocasiones, cueste conectar con ellos. Solo con un vínculo más íntimo lograrás descubrir qué pasa por su cabeza.

La herida del eneatipo 2

Cuando está dolido o le afecta algo, la forma de ser cambia. De modo que la herida del eneatipo 2 le hace perder su frescura, como las flores que se pagan, se vuelven tristes y se secan. Sin embargo, al igual que cuando el clima va a favor, las flores son capaces de volver a florecer. Lo mismo hacen los eneatipo 2.

Pero cuando lo que ven no les gusta y no se sienten cómodos se alejan, dejan una sensación de vacío que se hace latente en los demás.

Son personas con idas y venidas, necesitan también de su espacio y, en el momento de irse, te harán ver que no hay dramas, pero te dejan con la responsabilidad y el peso de sus actos.

En pocas palabras, nunca se sabe lo que quieren y lo que desean realmente. Se entregan y se van para luego volver. 

Porque se pueden quejar, pero al final, tienen la necesidad de volver donde comenzó todo. Siempre necesita volver al lugar donde nació.  

Al igual que la flor del comino, por ejemplo, el eneatipo 2 tiene la capacidad de hacer sentir de manera intensa. Su huella en los demás es tan fuerte que no importa cómo ni por qué se fueron, al volver, siempre los recibes con los brazos abiertos. Y hasta que lo hagan, solo te queda recordar.

Si quieres conocer más acerca de los eneatipos, no dudes en asistir a nuestra Formación en Técnica Correctiva Eneacuerpo. Aprenderás a reconocer los tipos que conforman el Eneagrama desde el cuerpo, los movimientos que hacen, las reacciones frente a las situaciones de la vida y a comprender cuánto tienes tú de cada tipo. De esta manera aprenderás de ti mismo y de los que te rodean.