¿Qué es el método Gestalt y cómo puedes llevarlo a cabo?

El método Gestalt considera a las personas como agentes primarios en la determinación de su propio comportamiento. Este enfoque es diferente de la terapia tradicional, que considera a los individuos como víctimas u objetos.
Las personas que confunden la responsabilidad con el deber y la culpa tienden a manipular y a presionar para realizar acciones contrarias a sus verdaderos deseos y necesidades.
En última instancia, este enfoque da lugar a una peor calidad de vida y a un aumento de la angustia. El método Gestalt es una herramienta útil para tratar este tipo de malestar, porque acompaña a los clientes a encontrar el verdadero origen de sus emociones.
¿Qué es el método Gestalt?
El método Gestalt explora a la persona a través de sus acciones. Todos nos comunicamos de diversas maneras, y muchas de ellas son inconscientes. Los ejercicios basados en la acción que se utilizan en la terapia Gestalt están diseñados para aumentar la conciencia de la persona para que pueda ver y gestionarse con el entorno que le rodea.
Un terapeuta Gestalt puede comentar patrones físicos recurrentes, siempre en tiempo presente, viendo que le sucede en el “aquí y ahora” y acompaña a observar las maneras que utiliza el cliente. También puede utilizar otros medios de comunicación, como el dibujo o la música, para estimular la conciencia de las personas.
El método gestáltico fue fundado por Max Wertheimer, y promovido por uno de sus alumnos, Wolfgang Kohler, que destacó por sus investigaciones sobre la mente humana y por su oposición al conductismo. En su libro La práctica de la observación, Kohler expone algunos de los principios de la psicología de la Gestalt, como la importancia de la conciencia y la atención.
Esto puede aplicarse a diversos ámbitos, desde el diseño de procesos hasta la vida cotidiana. Esta teoría es útil tanto para los individuos como para grupos de trabajo.
Entre las ideas clave de la psicología Gestalt están la conciencia y las relaciones (presencia, conciencia y responsabilidad son los pilares de la terapia Gestalt). Al centrarse en el presente, los clientes pueden ganar control sobre sus vidas. El aumento de la conciencia puede acompañar a la mente a ser más saludable, a reconocer las emociones y gestionarlas. Y a conectar con las propias necesidades físicas, emocionales y mentales.
Una persona puede sentirse más feliz, más tranquila y más realista después de experimentar la terapia Gestalt. Esta técnica también es útil para la terapia de grupo, que puede ser una forma eficaz de tratar los problemas relacionales con el otro (pareja, familia, trabajo, etc). También suele acompañarse con otros tipos de terapia.
La psicología Gestalt en la actualidad sigue evolucionando, tras los primeros trabajos de Wertheimer sobre la percepción y la naturaleza de la verdad. Se basa en la comprensión de cómo organizamos nuestras mentes y nuestra percepción. El fenómeno phi, o persistencia de la visión, fue un elemento clave en los primeros trabajos de Gestalt.
Esta ilusión óptica se produce cuando se muestran objetos inmóviles y se ven rápidamente. Es similar a la persistencia de la visión que la gente experimenta al ver películas.
En Europa, las formas más recientes de terapia Gestalt, llegaron del legado de Fritz Perls: Jim Simkin, Abraham Levistsky, Claudio Naranjo, Guideon Schwarz, Francisco Peñarrubia entre otros muchos.
El método Gestalt más reciente hace hincapié en el autoconcepto. Tienen un comportamiento más orgánico con el proceso de cada uno y hace hincapié en el proceso de autorregulación, donde solo uno mismo sabe que necesita, y a través del lenguaje del cuerpo, conecta con sus necesidades reales. Este trabajo se puede hacer individualmente o en grupo. Donde cada persona puede conectar con su propio maestro y su aprendiz.
Arteterapia Gestalt
Un principio clave de la arteterapia Gestalt es la interdependencia entre el organismo y su entorno. El flujo de energía comienza con la sensación y continúa a través de la conciencia, la movilización, la acción, el contacto y el descanso.
El Centro de Arteterapia Gestalt ha desarrollado una adaptación de este proceso denominada SIC AIDIR, que incluye SENSACIÓN, IDENTIFICACIÓN, ACCIÓN, ESTILO DIRECTO e INTEGRACIÓN. Cada paso del proceso se demuestra a través de sesiones vivenciales.
Durante una sesión gestáltica, el terapeuta puede pedir al cliente que exprese sus emociones y su lenguaje corporal mediante gestos. A continuación, el terapeuta gestáltico pedirá al cliente que repita un gesto para extraer la experiencia.
El terapeuta facilitará un debate con el cliente utilizando estos gestos para explorar las emociones que surjan durante el proceso. Durante este proceso, el terapeuta gestáltico observará el lenguaje corporal del cliente y utilizará diferentes técnicas, por ejemplo, puede invitarle a que hable desde su comunicación no verbal, es decir, lo que expresa su cuerpo.
El enfoque gestáltico también pretende acompañar a los clientes a ser más conscientes de sus propias experiencias. Los terapeutas utilizan técnicas que animan al cliente a tomar conciencia de sus pensamientos y sentimientos, sin presionarlo para que actualice recuerdos reprimidos en un entorno seguro.
De este modo, los terapeutas crean una relación segura y de colaboración entre el terapeuta y el cliente. Trabajan juntos para identificar la expresión emocional saludable y los ajustes que pueden estar impidiendo al cliente alcanzar sus objetivos.
Aunque el proceso implica un esfuerzo de colaboración, el objetivo es facilitar el desarrollo del cliente de forma positiva.
Algo similar ocurre en las formaciones de Técnica Correctiva Eneacuerpo que ofrecemos en Ágata Asensi. Mediante acciones como la danza, movimientos grupales y sesiones podrás lograr obtener mayor control y consciencia entre tu individuo y cómo te relacionas con el entorno.